Desde que Twitter comenzó su andadura, sus usuarios vieron la necesidad de compartir lo que otros publicaban en la misma plataforma. Hacerlo copiando y pegando era una opción, pero era algo injusta al twittero que lo publicaba originalmente. Así nacieron los retweets, en los que alguien comparte un determinado tweet atribuyéndolo y sin ocultar su procedencia original.
